Curso de ética periodística en La Retaguardia: ¿cómo dirigir el debate hacia un marco responsable?

Hemos recibido muchas demandas de lectores admirados preguntándose cuales han sido los métodos que nos han llevado a la cúspide la prensa Condal. Atendiendo siempre a nuestros moderados suscriptores, hoy explicaremos cómo colocar la idea correcta sobre el debate político y hacerla verosímil a partir de la repetición por el bien de la población en general. En un acto de generosidad y transparencia sin precedentes, les mostraremos algo de lo que pasa entre bambalinas del periodismo responsable.

Todo arranca tiempo ha. Concretamente, el 29 de diciembre de 2012. Nuestro siempre amado y nunca suficientemente ponderado Enric Juliana publica un artículo llamado Cantan las sirenas.

En él, ahonda en la moderación, nos sosiega y nos traslada su habitual y conveniente mensaje: el diálogo va a llegar, Rajoy va a hacer una oferta en breve y ya saben el resto porqué son ustedes lectores habituales. Eso sí, fijémonos en una frase del último párrafo (en un artículo de opinión, todo ocurre en el último párrafo, queridos suscriptores): “Artur Mas no puede rehuirlo, si no quiere convertir, en cuatro días, a CDC en el ala liberal de Esquerra Republicana.”

¿El partido mayoritario de los últimos 40 años en Cataluña convertido en un apéndice de una formación que no ha ganado ningunas elecciones? ¿Cómo es posible? Dejen que el maestro Enric Juliana les dé la respuesta:

¿Se percatan ustedes de la idea? 

1) CiU ha perdido muchos votos en el área metropolitana a favor de Ciudadanos (un estudio lo así lo dice).

2) Minimizar esta evidencia convierte a quien lo haga en un esbirro de la Liga Norte.

Prosigamos. ¿Existe algún estudio dónde se afirme que CiU ha perdido votos hacia Cs? No, no existe. CiU nunca lo encargó y nadie lo realizó. ¿Cómo demostrar que algo no existe? La teoría dice que no se puede. Pero sí podemos demostrar de dónde sí salió esa idea, así mostrar que no apareció en ningún supuesto informe. La idea del trasvase de votos de CiU a Cs proviene de este post que fue publicado el 27 de noviembre (dos días antes del hilo de tuits que antes hemos mostrado). Más concretamente, dicha idea proviene de este gráfico:

Les invitamos a leer el post, pero si quieren se lo resumimos: en las mesas electorales de la periferia de Mataró CiU pierde votos y Cs los gana. El autor explica que cree que esto se explica más por el aumento de la participación que no por un trasvase de voto, pero eso no importa. Tenemos la idea: el voto de Cs proviene de CiU.

Tras las navidades, a finales de enero, Carles Boix se dedicó analizar detenidamente los resultados electorales y cerró el tema definitivamente. De nuevo, les resumimos algunas de las conclusiones:

a) Los abstencionistas del 2010 que se movilizaron el 25N lo hicieron en favor del PP y de C's.

b) La fuga de votos de CiU (un 12% de los votos de 2010) benefició íntegramente a ERC.

c) La comunicación entre partidos rupturistas (CiU, ERC, SI) y partidos moderados (PP, C's) es de completa impermeabilidad.

Es evidente que estas conclusiones no confirman precisamente la idea de Enric Juliana. Pero debe defender su idea como un jabato. Y vaya si lo hace:

Tras muchas réplicas que le hacen ver su error, y puesto que un sabio es aquel que ante las dificultades extremas se retira para así poder luchar de nuevo, en el cierre de la conversación nos deleita con una respuesta que es pura finezza:

Los números sobraban, especialmente ahora que la idea ya ha calado en los ámbitos dónde interesaba que calara. Que mejor resumen que el estupor de Pol Antras ante la respuesta:

¿Y dónde ha calado la idea de Enric Juliana? En El País, por poner un solo ejemplo al azar. Como no hablamos de números, sino de temperaturas, Valentí Puig (ideólogo de Cs) se apunta a la hipótesis con el artículo De la Operación Roca a Mas. Y e-Notícies, digital cada día más cercano al Duranismo, se hace eco acrítico.

Pero la cita de la idea Juliana más importante no es enlazable: Duran i Lleida propaga esta idea en todas sus reuniones políticas, tanto en Madrid como en Barcelona. Tanto uso ha hecho de esta idea, que nos atrevemos a filtrarla sin miedo a desvelar nuestras fuentes.

¿Qué les parece? Así se enquista una idea: repitiéndola cuándo y dónde conviene. Hecho irreprochable si, como es el caso, con ello se busca dotar a nuestro sistema político de una mayor estabilidad y prosperidad. El fin justifica los medios, especialmente si es un fin tan noble como la convivencia.

Artículo elaborado por @elsomatent y levemente editado por nuestros becarios.